«El secreto de la existencia humana no sólo está en vivir, sino también en saber para qué se vive» Fiodor Dostoievsky
Te voy a contar de que se tratan las Psicoterapias Contextuales o Terapias de Tercera Ola. Ante todo es una generalidad pero surgen como evolución de las Psicoterapias Cognitivo Conductuales. Y hay diferentes modelos que las integran.
Desde las Psicoterapias Contextuales entendemos que el comportamiento humano sólo puede ser estudiado y modificado en el contexto en qué se desarrolla y bajo las contingencias que se presentan en ese contexto.
Los actos no pueden ser comprendidos empíricamente sin estudiar acontecimientos previos y consecuencias, por lo tanto el análisis funcional de la conducta es una intervención básica en ACT.
El tratamiento busca a la flexibilidad psicológica para establer una relación amigable con los eventos privados (pensamientos, sentimientos, emociones, sensaciones corporales, motivaciones).
Para alcanzar una vida con conexión y sentido, elegida y sostenida en aquello que se siente importante, debemos aprender a estar con emociones, sentimientos y pensamientos difíciles, aún así la posibilidad de sortear esas barreras internas, abre el camino a visibilizar las cualidades, relaciones, actividades que son esenciales en nuestra vida para sentirla poderosa y disfrutable.
Entendemos desde ACT, que la Evitación Experiencias es un fenómeno que lleva a limitaciones de conductas que se aproximan a los valores.
La aceptación, mindfulness (consciencia plena) y la clarificación de los valores personales.
Los valores orientan el horizonte de trabajo para la modificación de la conducta, buscamos reforzar acciones consistentes con valores, entiendo que la evitación experiencial de emociones desagradables es una barrera para cultivar una vida con sentido.
La práctica de mindfulness como un nuevo modo de vincularse con la experiencia desagradable (pensamientos/reglas, imágenes, sensaciones corporales).
El modelo entiende que el sufrimiento psicológico generalmente es causado por la interacción del lenguaje humano (asociaciones aprendidas) y la cognición; y el control del comportamiento humano por la experiencia directa.
Distanciándose de las terapias cognitivo conductuales estándar, no busca promover el cambio de los eventos privados (pensamientos, emociones, sensaciones corporales) sino una relación diferente con ellos.
Encontramos que hay diferentes contextos que favorecen el aprendizaje de la evitación experiencial del sufrimiento, a nivel macro los patrones culturales y la globalización hacen estragos equiparando la “felicidad y salud” con la ausencia de dolor, emociones desagradables de experimentar (ansiedad, enojo, vergüenza, culpa, tristeza), preocupaciones y problemas. Luego en los contextos micro como es el hogar, la escuela, el trabajo, se ve reproducir en modos vinculares superficiales.
Este camino hacia los valores tiene otros componentes centrales, como es la la aceptación, permitiendo abrir las puertas al malestar, evitando resistir a su presencia, las personas aprenden a estar con emociones desagradables de un modo ecuánime, afrontando la frustración y el sufrimiento psicológico de un modo funcional.
La realidad no está reflejada en los eventos privados, sino en un modo de evaluarla, los pensamientos sobre el futuro no son el futuro, sino pensamientos sobre el futuro.
Comprende que el sufrimiento es parte de la condición humana, las personas son seres sensibles, la paleta de emociones agradables y desagradables. Los valores son aquellos aspectos de la vida que para cada persona son importantes, por ejemplo el trabajo, la carrera profesional, las relaciones interpersonales, la recreación, la espiritualidad.
vienen a cumplir una función, rechazarlas trae más problemas que soluciones y los aleja de una vida que tenga sentido.
No se trata de sentirse bien sino más bien de vivir bien.
En la terapia centrada en valores se inicia clarificando los valores personales y dando paso en la dirección que se puede cambiar y se elige hacerlo.
Las acciones pasan a denominarse “acciones valiosas o no valiosas” esto significa que para afianzar al consultante en el compromiso hacia sus valores, se estará trabajando en registros diarios para permitir aumentar la conciencia acerca de la relación entre las acciones actuales y los valores. Se planifican acciones valoradas concretar y posibles, se le da un lugar especial a las acciones valiosas.
En el sendero de los valores hay paradas que tiene sentido hacer. La exposición a todo lo que se interpone entre la persona y sus valores, o sea las barreras, esto implica estar dispuesto a contactar con los eventos privados que se han convertido en un obstáculo para construir una vida con sentido, el rol del terapeuta para acompañar con calidez cobra un lugar importante. El desafío de las creencias culturales (extismo) imperantes permitirá hacer este camino más posible.
Otro aspecto importante es la psicoeducación acerca del lugar que tiene el lenguaje y la historia aprendida. Entrenar en la práctica de reducir el dominio del lenguaje, interrumpiendo las barreras y fomentando el yo como contexto desactivandolo de cualquier contenido cognitivo (pensamiento) y sus funciones.
Este tratamiento no te asegura que «te sientas bien» sino que podrás encontrarte con tus emociones y elegir hacia dónde ir, sin depender de que el evento te provoque algo agradable o desagradable, sino de que te acerque o aleje de tus valores.